Dale clic a las imágenes así como van. Alberto
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Las plenitudes (in)conscientes
Los cerdos no tienen glándulas sudoríparas, por eso se quitan el calor revolcándose en el lodo. Para los demás mamíferos, sacudirse la tierra y quitarse el lodo es algo instintivo, sobre todo al sentir que se endurece y, secándose, nos inmoviliza.
Igual que los seres humanos, el chanchopensante sabe que, después de jugar en la tierra, darse un buen baño es placentero, educado y necesario, aunque desde que era solamente un lechoncito descubrió que también le gusta la arena, a pesar de que es más difícil quitársela de encima. (Diálogos con Linneo)
El ChanchoPensante fue… una ocurrencia cierta, más que presunción o genialidad. Definirlo es como estar entre cronopio y fama.
Hace como tres años, yo sabía más o menos lo que era un blog, pero por falta de tiempo y exceso de timidez, me había limitado a la parte más técnica, a un universo conocido. La convivencia era algo que sucedía solamente “en directo”. Si con pocos hablo más de 5 minutos por teléfono, era impensable pasar horas y horas navegando historias personales (y menos comentarlas en donde cualquiera, o todos, pudieran verlo). Pero siempre hubo algo, en parte humor, en parte morbo, que pedía un espacio.
Desde el hijo pródigo hasta hoy, nadie ha querido darse cuenta de que los chanchopensantes no vivimos de la basura. Y tampoco la consumimos voluntariamente. (Diálogos con Kalimán)
Lo que sí recuerdo es haber descubierto un par de blogs que rompieron con mi timidez porque eran testimonio de amistades, proyectos y quehaceres: espacios para asomarse y compartir. Como los dueños de esos sitios habían compartido ya vida y trincheras conmigo, me sentí en confianza. En uno de ellos, mis palabras cobraron la fuerza de hablar de lo que me gustaba (y me daba de comer). En el otro, lo contado, ameno y divertido casi siempre, era un retrato desenfadado pero fiel de la realidad. Los comentarios, aunque esporádicos, empezaron a ser diálogos verdaderos. Aquí un fragmento:
“Regresar de vacaciones.
Es un tormento chino. Una muerte lenta por envenenamiento.
Si estás de viaje, el cansancio es lo único que lamentas. Dolor de pies, quemaduras en la cara y cuerpo; pero eso sí, bien cargado de nuevas experiencias.
Hasta ese día. El día antes de regresar.
Es como pararse al borde del precipicio. Los “pendientes” te asaltan, todo lo que hay que hacer empieza a tomar su lugar en la cola de trabajo. Arranca la máquina multitasking y… oficialmente se acabó.
Gueim ouber. ¿Y la cruda?
Evita la depre post-viaje. Piensa en el siguiente.”
“Para mí hay otro remedio parcial —o paliativo— para esa nostalgia macabra, ese vértigo existencial que es el fin de las vacaciones.
La crónica. Sí, esa plática gozosa, que puede ser por teléfono, o a golpe de cuartilla (electrónica o en papel).
La crónica por escrito permite contarlo de nuevo y releerlo, o compartirlo así, como lanzado al ciberespacio, para que a ver quién lo lee. Y si nadie, no importa; y si alguien, también. Al fin, lo bailado nadie me lo quita. Ese (el goce de leerescribir) es uno de mis favoritos.
Pero hay otro a la par: convocar a los amigos, a los seres queridos, al calor de un brebaje predilecto o una vianda común, y dejar fluir las palabras y los asombros, para cruzarlos con el aderezo de las anécdotas, con el condimento de los comentarios. Con la envidia que entonces se palpa, pero que se disipa en las historias compartidas…
Luego —entonces sí— la pregunta inevitable: Y el próximo viaje, ¿a dónde y cuándo?”
El contraste funcionaba, porque no era tanto. Pero un día llegó lo que para mí, Ivanius, es el verdadero Génesis de la Pocilga:
“Creo que es hora de que usté derrame o embarre las tripas en algo más personal o sentido —como aquello del pie izquierdo— en beneficio de la comunidá… digo, pa ponernos igual ¿no? Ea”. –10 de septiembre de 2007 1:58
La clave fue eso de ponernos igual. No lo de embarrar las tripas, pues la timidez (en mi caso) prevalece, sino la oportunidad de compartir, abiertamente en teoría, pero sobre todo con unos cuantos, esos cómplices que (anónimos o conocidos) nos visitan.
Que tenga pezuñas no significa que no tengo tacto. Sólo que no uso las manos (o los pies) para lo mismo que ustedes. O tal vez sí. Pies tengo, aunque sean pezuñas. (Diálogos sin métrica)
El caso es que a partir de ese intercambio empezó un cruce de mensajes y correos cuyo resultado es esta pocilga y su benévolo demiurgo: una entidad que cobraba solidez y se hacía presente, como siempre, en casi todo, especialmente el trabajo.
Lo único para lo que las pezuñas no sirven es para trepar a los árboles. (Diálogos con Darwin)
El resto, como dicen, es historia. Una historia que hoy empieza su andadura de tres cifras. Y que me ha hecho imaginar, pero (sobre todo) reír. Por eso es que es el ChanchoPensante, que puede parecer sucio, pero no lo es tanto.
Yo soy herbívoro ocasional por convicción y con criterio propio: eso de que las margaritas no están para la boca de los cerdos es mentira, ¿verdad, Margarita? (Diálogos con Fausto)
Hoy, en medio de la basura y las cosas que nos agobian, la reflexión y la alegría tienen un lugar, al mismo tiempo solemne y profundamente humano. Su nombre, para mí, es el espíritu Chancho…y Amén.
Gracias a todos los lectores, visitantes y comentantes de este su chiquero. Especialmente a Don 7p alias Alberto, “párdner in chanch”, como diría él, junto a los amigos y familia, que saben quiénes son… con derramamiento de sangre o sin ella. ¡Seguimos adelante!
Ivanius
Noviembre 2008
30 replies on “100”
Peinada y engalanada como lo prometí (nótese que son las 7am, pero es que era pa’ ustedes), estoy acá pa’ la prometida y esperadísima reunión. He tenido que tragar pinole con la sanguinaria historia de don Alberto puro corazón y nomás le digo con todo cariño que bienvenido al nuevo ciclo de los tres dígitos, esto es una resurrección como la de Gregorio Samsa (aunque en otra forma), pero de las buenas. Don Ivanius me ha llevado a un recorrido por la historia de la biología y también, su propia historia, de la mano de este chancho limpísimo, al que todos acá queremos ya tanto y que, nació en buena hora, cómo no. Enhorabuena porque el esfuerzo vale la pena, porque andando es como se hace camino y porque, también, aquí fue donde nos conocimos. Chanchibesos inmensos para ambos y me deben la copita para brindar ¡salud! (a esta hora, francamente no se me antoja). Siempre de ustedes, la súper fan Paloma.
Esta crónica kafkiana – gore de Alberto, reinvindica a los chanchitos como los primeros mártires del blog. De cualquier forma, deseo con ahínco que sus alter egos nunca tengan tan rojo-sobre-negro fin.
Ivanius: gracias por la crónica del génesis del chancho, bien dicen por ahí que amar y creer no hay como conocer. Siempre tus detalles y tu minuciosidad, me hacen sentir un poco atrabancada. Otra lección más de esta hermosa pocilga.
Reitero a plumazos de este tocado exagerado que me he puesto para la ocasión, mi fervor por este espacio, y saludo la nueva era del chancho que no requiere más que seguir echando las tripas del alma pa fuera para compartirla con nosotros: Su público cautivo.
ABRAZOS DE PEZUÑITA LIMADA Y PATICUREADA.
SU FAN FOREVER.
Paloma: Champagne y jugo de naranja parecen una bebida propicia a la hora del brunch, a tono con el trousseau de celebración. ¡Salud!
Mara: Puros verbos activos y poderosos. Sólo cabe responder como antaño: “A las pezuñas de usted”. 🙂
Don Alberto: Frank Miller, watch your back. Y… el último cuadro… ¿vaticina alguna barbacoa o cochinita pibil?
estaba planchando el traje para venir a la fiesta pero me acorde que es una pocilga y mejor me puse el overall para poder embarrarme a gusto.
pues, si, uno se embarra de tinta muy a gusto en este lugar y es de esa tinta pegajosa que no quiere uno quitarse de encima, asi como los chanchos con el lodo..
on’ta la salsa?
Lic: Roja, como la vida, por supuesto. ¿O era verde? Sírvase a gusto, que la tinta y la sang– perdón, la salsa, alcanzan para todos.
Compartir… Es un verbo sumamente complicado… Cuando yo decidí hacer un bló pensé en que sería algo en el que comentara como una profesional lo que pasaba en el mundo del deporte…
Otro bloggero me dijo que no cayera en la trivialidá de contar pasajes de mi vida personal, que mejor fuera sarcástica como yo lo soy usualmente…
No le hice caso… Simplemente empecé a escribir lo que sentía de una manera en la que yo me sintiera conforme… Con el paso del tiempo, de la añadidura de comentarios y de aprender a “compartir” esos pasajes de mi vida, me di cuenta que hay alguien a quien le interesa compartir también los suyos.
Gracias por hacerme parte desta pocilga y dejarme embarrar de lodo sabio en este chiquero…
Lau: Usté YA es una profesional, que TAMBIÉN comenta lo que pasa en el mundo del deporte. O sea que su bló es más completo y menos trivial de lo que creen usté y ese bloggero. Que igual tiene razón, pero en todo hay gustos y opiniones. Ora déjeme le subo el volumen a mis audífonos pa escuchar un podcast de alguien que sabe de deportes. Acá los chanchos ya sabemos a quién preguntarle sobre el tema. Fin del “sarcasmo”. 😉
Vivir también es un verbo complicado. Pero lo bueno es que a todos nos sale a la primera. Ah, y si el lodo de esta pocilga es sabio es porque cada quien trajo el suyo; la mezcla es lo que instruye, ¿qué no?
Ah, qué maneras de subirle a uno el ánimo.
Precisamente hoy rechacé una oferta importante por seguir con mi sueño. Vivir, es complicado, pero es una complejidad que nos llevaremos a la tumba y si tratamos de encontrarle a eso el hilo negro entonces habremos vivido en vano.
Gracias por escucharme. Si no me da miedo la cámara entonces pronto también podrá verme. Al menos por interné 😉
Me declaro conmovida ante tal despliegue de talento y sinceridad. Queridos Chanchos, los aplaudo de pie y me quito el sombrero (de Janis que me he quitado en otras ocasiones en esta pocilga). Gracias por que sus palabras me han hecho sonreìr más de una vez en este año!
Besos muchos y abrazos más!
Pd. Susanita y Muriel también los saludan (y buscan a Felipito que no se decide)
Los ultimos serán los primeros (Tonta disculpa, pero aqui estoy), poco tiempo tengo de pasar por aqui, pero me volvi asidua metiche, y cuando tuve que dar uno de esos premios que navegan por los blogs, no se me ocurrio mas que añadirlos a mis favoritos. Me late el espritu que se lee por aqui, Par de Chanchos, muchas felicidades!
Lau: Bien por el crédito de voz… y esperamos desde ya el debut “escénico”. 🙂
Ga: No se levante, que estamos en confianza; la admiración y el aprecio son totalmente mutuos, sobre todo por poner la muestra de constancia y nivel. Por cierto, Felipe andaba por ahí con cara de desvelado, y no es precisamente “morning person”, así que al rato le preguntamos qué se trae…
NTQVCA: Si algo tiene la pocilga son visitantes de calidá. Bienvenida siempre, y mil gracias de nuevo por el premio, más valioso por más inmerecido.
¡Qué barbaridad!
Ya son 100 posts que puedo presumir… “mira, estos cuates, yo los leo”
Será porque siempre viene algo inesperado, intrigante, inquietante, incitante o así jodido jodido, inspirador.
Ínclitos compañeros de la blogósfera, me quito el sombrero ante ustedes, y lo aviento a pocilga antes de seguirlo para el revuelque colectivo.
Mister Won-Tolla: Todo un honor contar con usted en “la piedra de Consejo” de la pocilga. Deje usté el sombrero donde quiera (los de hasta abajo son de los Chanchos) y ¡salud!
Pos fíjate que a raíz de que sugeriste que llevara crédito mi cápsula, ya lo nombro…
Se siente re bonito escucharlo 🙂
Antes de empezar a aburrirlos con un discurso que se quedará corto ante tanta amiabilidá de todos ustedes, me declaro emocionado hasta el sudor bajo el foco de carnitas.
No hay ni cómo hacerle para agrecerles lo suficiente sus palabras y tiempo invertido en las lecturas de este espacio.
Cuenten queridas amigas Paloma y Mara, con que ya vendrá el tiempo en el que pague mi deuda de honor con ustedes. Porque ya lo saben: A todo puerco, le llega su San Martín; y no Texmelucan.
Ahora volteo acá a la izquierda, y qué veo. A mi querido Lic. Quien ha resultado tan llevado y traido a últimas fechas, pero que como los buenos no se raja y sigue más combativo que nunca.
El destino ya nos emparejará ai en las tortas de la glorieta de los camarones, o de jodido en los de cecina del mercado de Azcapocalipsis.
El mundo es ancho y largo, pero al final más chico que un pueblo. Y qué pasa, ps que soy casi-vecino de una estrella naciente de la radiofonía en la ciudá.
Y digo ciudá, porque aunque viva usté en Ecatepé, y yo en Izcalli; podemos decir que vivimos en La Ciudad de México (así, con mayúsculas).
Y también podemos decir, que somos cuates. Salud, Lau.
Compré unos discos de pilates, videos, pues, para agarrar suficiente flexibilidá y poder genuflexionarme lo suficiente pa ponerme a los pies de sus pies, Señorita Escritora.
Que eso del sombrero me hace comer harrtísimas ansias. Ojalá y algún día tenga yo suerte de verlo pa contarlo. Abrazo.
A mi me gustan los canes, por agrdecidos y fieles. Nomás será también porque quisiera que se me pegar algo de eso.
Porque a últimas fechas he andado fallo garrafalmente en ese departamento, mi querida Notienequeverrrr.
Recién le eché ojo a su concurridísssimo sitio, y veo que nos ha echado un lacito por ai.
Chale. Trataremos de corresponderle en forma, que no en tiempo, muy pronto. Y aunque sea lacito, lo cuidaremos pa que no se ponga como acostumbra nuestra especie.
¡Ah! los viejos conocidos.
Todavía recuerdo aquel invierno de 2006 cuando intrigado me preguntaba quién sería el tal Won-Tolla; y cómo se atrevía a revelar -bueno, sin tanto revelar- detalles de su existencia.
Al principio regresaba yo por pura y neta curiosidá; y ahora, echo miradas al ríder todos los días, con la esperanza de encontrar algo nuevo de su parte pa deleitarme la neurona.
Seguiremos acá, mi querido Lawrence, en este diálogo a la distancia, esperando los ripláis a cada oporunidad.
Gracias a todos, y ps esperamos que esta sea nuestra plataforma para que el buen Ivanius, de una vez por todas, se anime a pblicar algo de su extenso repertorio; y no nada más onlain, sino en jard cópi, como dios manda.
ahhh que bonito…casi me arrepiento de no haber traido el traje y la corbata.
ya quiero que llegue el post 200!!!
Muchas felicidades, un sitio con altos niveles de colesterol, pero sin duda suculento tocino.
Esperen esperen.. aun es tiempo de comentar???? esperen…
7… Sera menso, sera tal vez algo que a la gente de la vida diaria sin sentimientos le parezca tonta, pero creo que este medio ,e dio a una de las personas mas interesantes, que mas aprecio y no conozco. La union que este medio me ha dado con usted y la gran oportunidad de leerle me hacen sentir afortunada, es bueno, muy bueno saberse leida por un gran Chanchis como usted. Aqui espero estar pal 200 y el 300.
Ivanius.
No por ser segundo en mencion le guardo menos aprecio,mire que escribirnos sobre los rincones insolitos hacian que el espacio en el trabajo fuera mas paradisiaco, tiene usted un toque harto fino para escribir, y sobre todo la calidez, y mire que yo soy esceptica de los sentimientos on line, pero puedo decirle con toda honestidad que realmente aprecio lo que escribe y sus visitas y comentarios son para mi realmente valiosos.
Felicidades a la Chanchopensante Corp. Que gracias a ella desarrolle la capacidad de querer on line.
Cheers con el guisquito que nos debemos…
Clau: Halagado más allá de lo que puedo escribir, y más aún, por lo que usté nos, me, escribe. Algo estaremos haciendo bien, que congregamos gente ATM. Como usté. Pronto, el güisqui.
Y sí, ha dado la capacidá de querer on-line, como dice la también vecina Clau…
Emotivas las líneas que dedica a cada uno de los que nos damos el gusto (no la tarea) de leer cada que nuestro scroll blog nos indica que ha actualizado su chiquero…
Aqui seguimos…
Lalo: Gracias. Por todo (y lo que falta). Un abrazo.
Me uno a las que declaran amor al(os) puerco(s) on-line!
uf uf uf uf uf uf uf…
Mr 7w7: There you go for the groceries. Rice?
Tarde como siempre, sus chanchísimas majestades, me presento a ver los escombros de la fiesta que tuvo lugar en este mismo espacio. Es tarde pal borlote, por lo que no extrañará que mi chongo fiestero esté fuera de lugar. Pero no es tarde, me imagino, para presentar mis felicitaciones a los titulares de este buenísimo espacio. Acá les seguiré leyendo hasta que lleguen a las cuatro cifras.
Un abrazo juerte a ambos chanchos, tan queridos, respetados y desconocidos.
Diana.
Por cierto, no sabía eso de las glándulas sudoríparas de los chanchos. Yo siempre oigo decir eso de que se suda como puerco. No dudaré en corregir tal terrible prejuicio en su oportunidad.
Diana: La fiesta no se acaba hasta que no se vaya el último (o la última). No sobra decir que usté y los amigos de la granja son y serán siempre bienvenidos, hasta las cinco cifras o hasta que el puerco aguante. Abrazo.
Segunda parte del discurso.
Caro Lalo:
Por mi culpa, por mi culpa, por mi grande culpa. Charros, como decía, soy ingrato. Pero no pierdo la emoción y el gusto de verle por acá; manque no sea pa echarle una línea de imeil o una muestra de vida ai en el famoso sesoli.
Bueno, sin arrastrarme tanto que se mensucia el traje, gracias y hasta siempre.
Mi contratipo en la de chéspir:
Papá, you just taught me the way.
Y Dianiiiita:
Auún cuando ya estamos sacando los cadáveres de la peda épica que se armó en este espacio, queda todavía lugar para el abrazo fraterno, la sonrisa sincera y bululú.
Bululú pues, a usté y al pato, y ps nos vemos por acá, allá o donde guste y mande.
[…] de que publicamos el cien en estas páginas, han acontecido algunas asombrosas sucedencias que cuál Ripley, vamos, ni el […]
[…] que chingao, se nota cuando estoy en las mismas… se parece harto a aquel memorable post 100 y a otro hecho por el buen @tebin pero -Chale, de nuevo las explicacioncitas- ya sabrá alguno de […]
[…] Primero fueron cien. […]