Noche muy noche, se detiene un auto. Se baja la ventanilla y me dicen:
– ¡Oiga!…
Si, usté. Ire, esque tengo una perrita, así esnáuser como ese que trae ahí.
– ¿…?
– …sesque nadie la puede cuidar. Y como yo trabajo…
Estupor.
– ¿No la quiere?
Largos segundos para contestar.
– mmm… ¡sí!, ¿porqué no?
– Órale. Pues déme su teléfono y le hablo mañana temprano pa ponernos de acuerdo.
– ¡Ajá!, si… Seguro.
Aquí viene una elipsis como de reloj, desa que usan en la saga “de las galaxias”.
Viernes por la mañana. Camiseta usada, pantalón de “camuflash”, chanclas naranja escándalo.
“riiiiiing… Riiiiiiiiing”
– ¿Si diga?
– Oiga, habla el de la perrita ¿dónde vive?
– aaa, pos aquí en calle desta con paseo del dese.
– Sesque ya voy de salida. Le llevo a la perrita.
– Nos vemos en la puerta.
Ni bai dijimos.
Salí y ya estaba ahí el mismo tipo, en el mismo coche, pero ahora con una bolsa de plástico, un carné y un cachorro.
Sin mediar saludo me dijo:
– Aquístá el alimentito, su carné de vacunación y la perrita. Se llama Hanna.
– Gracias. La vamos a querer mucho.
– Si, se ve. Adiós Hanna.
¡slam! Vrrooommm. Desapareció.
Esto que escribo sucedió el pasado jueves.
En algo así como 2 minutos efectivos de diálogo, mi familia creció. Ya no sé si fue un 25% o un 20%, el chiste es que así a la de sin susto, aceptamos un cachorro que en la vida habíamos visto, sin saber si no tenía pulgas, si no estaba infectado con algún virus mortal o si no era un paquetito de mariguana con patas; desos que incriminan hasta al más puesto.
Y ahora, después de que pasaron ya al menos dos días, reflexiono:
O soy de plano muy ingenuo, o deveras existe eso llamado “buena fe”.
Eso cuando las palabras significan lo que deveras significan sin “aaa sesque yo creía… Sesque ¿a poco creístes que era tan fácil?”
Bueno, no se qué pensar todavía, pero de ahora en adelante, la frialdad de los números hablará por mí:
“déme una bolsa de alimento pa medianito y una pa cachorro”.
Uf.
4 replies on “=O”
¿Quién dijo que la buena fe no existe?
Felicidades por la nueva adición a la familia… y por una nueva definición de la “suerte perra”, que no es lo mismo que la perra suerte.
Sólo espero que el veterinario le haya dado el visto bueno. Porque de que llegó a buen puerto, eso ni se discute.
Pues yo recibí un Snauser enano y lo aluciné. Son perros medio histéricos y nerviosos. De hecho el alucine era mutuo y luego se orinaba en mis zapatos. Pero estoy seguro que tu si podrás tener buena química con el animal.
Suerte 😉
Ahhh, ¿y no traía gatos?
Ora que te lo encuentres, espero que le esté estorbando un gato, y ya te mochas.
O un alaskan malamute.
¡¡¡Quiero que pase el señor de los perros y me regale un alaskan malamute chiquito!!!
Y ojalá que también me toque con el superpaquete de iniciación, porque, si no, hay que hacerle mucho gasto y no, así mejor se lo regreso.
Dile.
Pues ma ha sucedido que me encuentro al señor de los perros, pero no trae malamutenss.
Dados los estratosféricos precios de esos canes, generalmente la gente que ya no puede tenerlos, no se deshace de ellos manque los tenga hartos-jodidos de travesuras, marranadas o nomás porque no se fijaron bien que no cabría en la azotehuela de 1.5 m2 del depa.
Prefieren que el pobre fulano sufra la muerte lenta del sedentarismo extremo antes que reconocer su error.
Lo bueno lo bueno señores comentantes, es que como dicen, este bonito ejemplar cayó en blandito; y aunque estamos en esos días de entrenamiento de esfínteres en que la casa huele a perro por donde se le busque, creo que es sólo el comienzo de una gran historia.