Con imaginación, un palo de escoba puede ser espada; un poco de pintura hace una cicatriz sanguinolienta; un trozo de tela con gis y un gancho de alambre le dan el toque final a un auténtico pirata.
Sin embargo, parece que eso puede ocasionarte problemas si eres un adulto que usa juguetes para contar historias. Aunque el público te aplauda.
Escenas bíblicas. No pongo la marca, pero el sacerdote que las armó fue demandado por los fabricantes de los muñequitos, que dicen que no fueron hechos para ser alterados.
Explíquenme, para saber si tengo que ir a despintar mi Batimóvil… digo, mi patineta.
7 replies on “Rincones Insólitos: No se vale jugar”
Se escandalizan con eso… En el tianguis cercano a mi casa venden pura figurita malhecha con foamy, y qué y qué
La moraleja quizá es, tomando la idea de Lau, irte al tianguis y hacer lo que se te ocurra, porque ahí no habrá marca que pueda demandarte, puro guacamole pop… ¡Excelente rincón insólito! Un abrazo caluroso.
Si no me dejas dar una vuelta en tu Batmobile ¡Yo rajo!
Cheers.
Ah¡ güeno,lo que pasa que el padre quiso explicar la muerte de Cristo con play(se me olvidó como se escribe)y por eso se enojaron.
Qué pesados,todo fuera como eso.
Ayyy¡ muchos saludos,se te quiere con todo y tus libros.
la fe? nel!! la lana va por delante!!!
corporativismo canibal.
a ver si Bimbo no me demanda por usar como palillo de dientes el alambrito de la bolsa de pan .
Lau: A mí lo que me molesta es que le pongan límites a la imaginación… cada quien juega a lo que quiere con sus juguetes, ¿no?
Paloma: Yo por eso juego a escribir.
Mr 7w7: ¿On’ta su traje de superhéroe, a ver?
Malquerida: Eso mero, lo que se trata es de jugar… Y mis libros y yo decimos que gracias.
Lic.: No creo que lo demanden, sobre todo si antes se hizo su sandwichote.
Yo formé parte de un selecto grupo al que le fue compartido estas imagenes hace unos días, y me perecieron geniales, pero el empuje al segundo nivel, sin duda, se lo da la censura y la intolerancia.