Tal vez te preguntes por qué incluir esta pequeña figura en la representación de un acto que, según dicen los que saben, simboliza la máxima gloria de la naturaleza y la trascendencia del espíritu.
Si él hubiera sabido lo que tú pronto leerás, el querido loco de Asís habría recibido con alegría al pingüino en el homenaje que ideó para honrar a su Salvador. También creo que el juglar de la Porciúncula (ese que en su chifladura hermanaba a la luna, al arroyo y al lechón) reiría con esta historia, que otro loco, el que esto escribe, se ocupó de investigar para ti.
Muchos piensan que los animales, plumíferos, lanudos o lampiños, con pezuñas, garras o escamas, son criaturas torpes y bastante bobas. También, estoy seguro, más de un par de ojos querrán hallar en lo que sigue referencias ocultas que no existen; cada quien usa la imaginación como puede.
Hoy, muchos animales, entre ellos el pingüino, son símbolo global aun cuando haya quienes los señalen como algo fuera de lugar. No importa: ellos seguirán allí tan campantes.
La verdad (no te sorprendas) es que todas estas criaturas pueden hablar; uno de ellos dejó como testimonio algunos apuntes que, por palidecer en importancia frente al Manuscrito Q o los rollos del Mar Muerto, habían pasado (hasta ahora) inadvertidos.
Fue una feliz casualidad (y no una provocación, como algunos dicen) lo que me permitió rescatar esta historia, algo inconexa por su naturaleza, pero sin duda interesante. Ya juzgarás si valió la pena el esfuerzo que el cansancio y la modestia me impiden evaluar. (continuará)
Imagen: BabyTux, símbolo de Linux. Tomado de Wikimedia Commons.
10 replies on “Primera Parte: Una investigación difícil”
A mi los plumíferos me dan ternura porque son muy tranquilos todos ellos por lo general.
Ya quiero leer más, no te demores porfa…
¿Cómo sabes que es mi cumpleaños?, yo no te lo dije 🙁
Plumiferos, pelados o peludos, no importa… Me declaro pro-animalista! Y si, ademas, tienen a bien dejarnos sus apuntes, ya me tienen a sus pies (o patitas o pezuñas…)
Impaciento.
Mas besos
More promising than the “Sayings Gospel Q”
Pensaba que era un tanto extraño, situar a un pingüino en el Medio Oriente. Pero luego, vino a mi mente “La Marcha de los pingüinos”, quienes de alguna manera también peregrinan, recorren grandes distancias para poder procrear. El simbolismo de ese bellísimo documental, es el sacrificio en pos de una nueva vida. Y es ahí, donde le encuentro una gran relación en la historia de Belem. “Un pingüino en Palestina”; me gusta hasta el título.
Abrazos fantasiosos
No sé por qué pero recordé el inicio de Dumbo, cuando el trenecito del circo
va en esa noche lluviosa, mientras relampaguea y la voz grave del narrador,
y el trenecito chucuchú decía: “Podré subir, podré subir”… así me imagino
a tu pingüino: “Podré estar en el nacimiento, podré estar en el nacimiento”,
jajajaja!
Va que va, esperamos con intriga la historia!
Saludos!
Jajaja, la jess con lo del Dumbo. Te mentiría si digo que ya lo sospechaba, porque eso de los delfines parlantes, por ejemplo, siempre me pareció teoría conspirativa, así como de película antinipona, pero ahora que lo develas, adquiere plena lucidez. Se camuflan bien esos bribones, y hasta nos han hecho creer que son pájaros bobos. Espero que pronto los desenmascares. Saludos.
Malquerida: Yo conozco unos cuantos bastante intranquilos. Cada parte llegará, aquí mismo. Tú lo dijiste, no te hagas. Abrazo.
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Pelusa: A sus pies de usté. Pacientemente. 🙂 Beso.
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Mr. 7w7: Expect the unexpected. I know I do.
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Marichuy: Todos, hasta los no pingüinos,”recorren grandes distancias para poder procrear”. Qué sacrificados. 😉 Abrazos enrevesados.
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Jess: 😀 “Verás que sí, verás que sí”. ¡Saludos!
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Don Canallo: Lucidez no sé, pero para lucimiento, ya hay testigos de calidad con todo y máscara. Abrazo.
MMMMMM QUE DELICIOSA HISTORIA SE AVECINA POR AQUI… ESTARE MAS QUE PENDIENTE, SUENA MUY PROMETEDORA.! ;0)
BESOS
FotoMadrina: Y no serán puras promesas. Lo prometo. 😛
¿Será que ya estamos fuera de órbita todos los de esta pocilga que hasta nos parece maravillosa la idea de un pinguino en Palestina o que yo llevo ya un número considerable de horas poniendo comentarios a todos los posts que tenía atrasados y comienzo a ver visiones? ¿Sérá que el año lleno de accidentes no geográficos, o sí, pero ni tanto, nos provoca un espíritu aventurero más allá de las conciencias o que el blogbarrio se pinta navideño con sus particular chanchimiento? ¿Será la crisis o el sereno o que la imaginación sin límites se ha estacionado con su trineo a la orilla del desierto y conversa con Mahoma mientras los invitados nos sentamos alrededor del abrevadero a disfrutar de las carnitas y el pibil? Esto y más, en el mismo baticanal, perdón, pinguincanal a la misma pinguihora y con muchas pinguiaventuras por recorrer (no podemos decir volar, por razones obvias)… (ora sí, ya me piré, ni pex)